Todos los lugares donde fui son realmente hermosos.
Los amaneceres...
Las caminatas cerca a los animales
Ver el sol caer...
Las lagunas increíblesss.
Los geiser
Este parque de piedra (dicen que parece Jordania)
Pero a mí me encanto la laguna verde ♡.♡
En las noches ver el cielo totalmente estrellado.....wooooo hermoso, lamentablemente mi lente no alcanza para tomar esas fotos :(
Todo muy bonito, lindo los paisajes y todo pero lo que más me gusto fue conocer a Gisella, una nenita de 3 o 4 años.Al inicio (lo acepto, quería ahorcarla) pensé que estaba 'torturando'a un cachorro...me acerqué a ella para explicarle que no lo trate así, ella repetía 'no no no es mío'. Tercaaaa como no se quién, no quería entregarme el cachorro.
Mientras distraía a Gise con sus juguetes, logramos salvar por un momento al cachorro o mejor dicho creíaaaaamos haberlo salvado ( ERROR) . Rudy lo escondió en la cocina del restaurante donde estaban los padres de la chiquilla.
Al ratito, escuchamos a la madre gritar 'saca a tu perro o lo mato'..ella corría gritando 'mi perro no mi perro no'.Me quedé en shock, no podía creer lo que había escuchado. Cuando regresó con el cachorro, le pregunté lo que le dijo su mama ( siiiii pensé que había escuchado mal), Gise me confirmó y me contó como su papá había ahogado sus gatos delante de ella ( encima con detalles, pueden creeerloo?!?) Fui a la cocina llena de cólera para hablar con la señora pero no estaba.Me sentía totalmente impotente, como pueden hacer cosas así y peor aun delante de esa nenita que esta creciendo ( creo q cualquiera en sus sentidos se hubiera puesto asi). Después nos quejamos de porque el mundo esta asi.
No entendía los abrazos sofocantes de Gisella al cachorro hasta que paso eso para entender que ella tan pequeñita lo único que quiere es protegerlo, cuidar que nadie le haga daño... sólo que no sabe como hacerlo por eso es un poco tosca. Me equivoqué al etiquetarla antes de estar con ella. Y eso es algo que muchas veces he hecho cuando he visto niños con animales, su comportamiento tiene un razón y todo viene de casa.
Pese a todo, Gise me enseñó que no hace falta ser 'adulto' para proteger y cuidar a algo o alguien que quieres tanto.
Al ratito, me fui con pena me despedí, me prometió que cuidaría al cachorro y que se portaría bien...toda una angelita.
No me voy a olvidar de esa sonrisa enorme, coqueta e inocente fuera del carro, despidiendose y gritandome que iría a Uyuni al día siguiente para encontrarnos.
No nos volvimos a ver pero espero que este bien y su perrito también ♡♡.
P.s. Esos tres días también hubo mucha cumbia peruana (nooooo!) , esta canción parece que era una de las favoritas del conductor y me recuerda a mis amigas cumbieras :):)
C.